DECIR QUE ALASKA ERA UN LUGAR MEDIANAMENTE DECENTE ERA UN COMPLETO ERROR, pues lo más divertido que había pasado desde su llegada, había sido conocer a la familia Cullen y a Renesmee en el pueblo. El paso de las semanas se había vuelto algo tedioso, y comenzaba a creer que años atrapada en Alaska iba a dejar serias secuelas en su persona; secuelas realmente serias como la palidez con la que iba a tener que cargar durante los 365 días del año, y como su ropa de pronto dejaría de ser veraniega y colorida para optar por lo más abrigador en vez de lo más bonito.

Fairbanks ya no era un lugar interesante, al menos, ya no en su cabeza. La euforia del momento ya había acabado y parecía incluso que ya se había acostumbrado a la intensidad de Introducción a la Psicología todos los Lunes sin falta, incluso al aburrimiento que a veces sentía en Historia de EEUU cada jueves bajo la mirada intensa de Jasper Hale.

Lo importante de cualquier manera, era la increíble amistad que había formado con Renesmee Cullen. Lo único que importaba al final del día.

Y es que le agradecía a cualquier Dios que existiera en el cielo por haberla juntado con la única chica que era capaz de soportar más de la mitad de la semana sin forzarlo. Se había convertido en su confidente y compañera de crímenes siempre aguantando la risa en clases como si hubieran estado destinadas para conocerse en algún minuto de su vida. Necesitaba una amiga de verdad aún sintiéndose tan forastera en un lugar que como Alina, debería estar llamando su segundo hogar — Al menos, necesitaba una después de no recibir ninguna llamada de sus compañeras de banda aún pasando semanas.

No había conocido a ningún familiar de Rene y realmente lo agradecía por que no eran como ella, la menor de los Cullen era una especie de rayo de sol en medio de los días grises: optimista aun que las llenaran con demasiada tarea y tuvieran que leer libros gigantescos sin dejar que su humor decayera ni un poco — Era algo distinto, la vibra que los demás le daban era una realmente contraria a la de ella; la hacía sentir incómoda, observada en un espacio donde no tenía control sobre sus propias acciones.

Así la hacía sentir Jasper cada jueves. No había hablado ni una sola vez con él, sin embargo, Jasper tenía claro que sabía quién exactamente era, las había visto juntas durante el almuerzo un lunes después de la única clase que compartían y sabía que era la Sophia amiga de su hermana, la única chica con la que realmente se juntaba casi todos los días.

Al parecer era muy complicado saludar a una persona y ella por su cuenta, era demasiado orgullosa como para acercarse a presentarse por su cuenta.

Cada jueves, actuaba como si no contara con el hecho de que ella se daba cuenta cuando tomaba un asiento posicionado casi de manera estratégica para a veces mirarla de reojo mientras conversaba con Novac.

Los amigos de Alina por otra parte, tal como había temido en un principio, eran por lejos los más extraños de toda la universidad. Casi como si hubiera sido clarividente adelantandose a hechos obvios, su hermana se juntaba con los únicos que pasaban en una esquina del jardín aún bajo cero con botellas escondidas de alcohol en la mochila sin tomarse algo en serio.

Lo único bueno de la semana, había sido su adelanto en Maggie's. Marva había incluido el extra del miércoles cuando recién llego y había sido lo suficiente como para poder costear la inscripción a un club cannabico y así, por fin, comprar un poco de hierba que escondió como si fuera su mayor tesoro en el joyero sobre su buró.

"¿Supiste que ahora sí, mañana habrá una fiesta en una de las fraternidades?" — "No recuerdo el nombre exactamente, pero no creo que importe, me invito un chico lindo cuando no estabas — un tal Sebastian"

El café quemó sus labios mientras arrugaba la nariz armándose de la idea de ir a una fiesta, no es que no supiera disfrutar del minuto, pero ir a una fraternidad no era algo que le llamara la atención. En punto por que eran los mayores idiotas que podría haber en la tierra tanto en California como en Alaska, pero en realidad, eran las malas memorias que le traía luego de tener que ir por su hermana cada fin de semana a lugares repletos — temas más profundos.

Sin embargo, ahí entraba en juego la emoción de Rene, esa amplía sonrisa que tenía genuinamente emocionada por asistir a un lugar, como si jamas hubiera a ido a una fiesta en su vida. No pudo negarse, primero por qué lo había prometido hace rato y por que jamás la hubiera dejado ir sola a una fiesta menos con los tiempos en los que vivían, y segundo; su instinto de protección era demasiado como para dejarla sola entre tanta gente — no iba a olvidar esa sensación que experimento en la disquera, no quería lo mismo para ella.

"Si vamos mañana, tienes que prometerme que vamos a hacer el trabajo de Introducción juntas, por que siento que estoy haciendo algo completamente distinto a lo que nos pidieron" pidió.

"Tienes un trato" le ofreció su mano para sellar una promesa definitiva que no dudo en aceptar  "Puedo pedirle a Alice que venga por nosotras en la madrugada, me debe un favor"

"Eso sería genial" — "¿Crees que puedan dejarme en casa de vuelta?"

"Contaba con ello" en su mente, Rene tenía todo planeado, desde la excusa que iba a utilizar hasta la explicación que le daría a sus sobre protectores padres para asistir a una fiesta con gente que teóricamente, era mucho mayor que ella "¿Esa no es tu hermana?"

"¿Qué?" miró a todos lados antes de verla en su mismo grupo de gente que le daba mala espina, y su ceño, casi de manera automática pareció fruncirse en desaprobación. Esa, en efecto era Alina Bliss en su máximo esplendor "Sí es ella" le confirmó, a pesar de no conocerla, pareció reconocerla por la foto que había visto desde su teléfono la semana pasada "Tienes buena memoria"

"Memoria fotográfica"

De las cuatro personas con las que caminaba, solo ella era la que daba la impresión de ser una intrusa llena de color en un grupo de gente que tomaba toda su energía — y es que dejando todo el esoterismo de lado, le causaban mala espina a un nivel de sexto sentido, como ese que tenían las madres cuando tenías un amigo que posiblemente iba a traicionarte o herirte de la peor manera tarde o temprano: clarividencia basada en hechos tangibles.

Al verla a lo lejos se despidió de los demás para correr a su encuentro con una sonrisa en el rostro, a pesar de cualquier cosa estaba asistiendo a todas sus clases sin falta aún cuando salía ciertos días de la semana.

"Alina, un gusto — la mejor Bliss" saludó a Rene primero al llegar a la mesa donde ambas se habían sentado, se habían quedado un rato en una de las cafeterías de la universidad conversando de la última clase y lo idiota que podía llegar a ser su profesor Viggo "¿Tienen periodo libre?"

"Ya no tenemos mas clases, pero quería tomar algo antes de ir a casa" le explicó ella "¿Quieres?" empujó su taza hacia ella mientras tomaba asiento al lado de Rene sosteniendo la taza anaranjada aún caliente entre sus manos, soplando del contenido en un intento de volverlo algo más tibio.

"¿Interrumpí algo importante?"

"No," negó Renesmee rápidamente "Estábamos hablando de una fiesta mañana a la que nos invitaron — podrías ir con nosotras si quieres"

"¿Hablamos de Kappa Omega?" lo dijo como si alguna de las dos hubiera sabido de que hablaba "Me encantaría ir, pero tengo un enorme ensayo sobre el Arte Abstracto y lo único que voy a hacer es sentarme en frente de la computadora por horas para sentirme productiva"

"Suerte" — "Suena intenso"

"Demasiado" concordó con su hermana "Pero estoy feliz de que por fin te decidas salir de tu cueva, voy a ayudarte con tu maquillaje para que consigas un polvo que te quite todo el mal humor"

"No necesito un polvo, pero es bueno saber que estás dispuesta a ayudarme a conseguir uno, bastante leal de tu parte"

"¿Las invitaron personalmente?" preguntó curiosa "Escuché que solo te invitan si les pareces bonita — sexista para el siglo 21"

"Invitaron a Reny"

"No parecía que se acercara a mi por que le parecía guapa, fue por amabilidad, estaba sola" se defendió con un enorme cargo de conciencia — su novio de literalmente, toda la maldita vida se había quedado en Forks y su vida amorosa solo se había reducido a él cuando finalmente tuvo la edad para algo medianamente normal.

"Si te invitaron fue por algo" le guiñó el ojo "Eres bonita Ren, aprovéchate de los hombres para siempre"

"Bueno, ya tengo novio así que no creo que pueda hacer mucho"

"¿Tienes novio?" Para Sophia pareció una revelación mayor mientras se llevaba una de sus manos al pecho, simulando dolor "¿Un novio y no me contaste nada?"

"Nunca salió al tema" se defendió, y tuvo sentido en su cabeza por que no solían hablar de hombres en su tiempo libre, era un tema algo aburrido "No sabía que era un dato importante"

"Lo es" comentó Alina mientras encendía un cigarrillo "¿Llevan mucho tiempo juntos? Mis mas sinceras condolencias"

"Desde que tengo memoria" lo hizo sonar como algo normal, pero si hubieran sabido la historia completa, seguramente hubieran perdido la cabeza "Siempre hemos estado juntos"

"¿Solo has salido con él?" inquirió la mayor de las Bliss apoyando los codos sobre la mesa "¿En toda tu vida solo has tenido una sola relación?"

"Sí, toda" puso gran énfasis en la palabra como si toda una eternidad hubiera pasado por ella, y ante su tono, el entrecejo de Sophia se arrugo en desaprobación "Su nombre es Jacob Black, vive en Forks — soy de ahí" le explicó a su hermana.

"Pareces aburrida de este tal Jacob Black, y él suena aburrido también" dijo Alina, y tuvo que resistir las ganas de golpearla por debajo de la mesa, solía decir ese tipo de cosas deliberadamente como si pudiera oler los problemas ajenos a kilómetros, comentarios desubicados justo en el momento menos adecuado "Lo siento — mal comentario"

"No importa" pareció incómoda de igual manera, aun que fuera demasiado amable como para admitirlo "No se si esté aburrida, solo que siempre hemos estado juntos, como si el destino nos hubiera atado de antes"

"Tal vez estás aburrida de la misma relación de siempre" no habían compartido ni más de media hora juntas sin embargo ahí estaban hablando de un tema personal que ni había hablado con ella aún conociéndola hace más tiempo "Ya sabes, dices que llevas toda tu vida con el mismo chico"

"Es válido de cualquier manera" aportó Sophia mientras se encogía de hombros "Las relaciones a largo plazo son algo dificil de llevar"

Rene pareció considerarlo en su mente, como si hubiera necesitado meditar lo que le habían dicho en voz alta confirmando lo inevitable: ¿Qué era eso de estar con alguien solamente por algo casi cósmico?

"En fin, ahora que dijimos lo importante — Puedo invitarte a cenar como toda una mujer adulta a nuestra casa. Hago la mejor pasta que te puedas imaginar y necesito a alguien más la pruebe"

"Eso suena genial" aceptó casi de inmediato "Estaría encantada de ir"

"Si quieres traer a uno de tus hermanos soltero tampoco tendría un problema"

"Lina,—"

"Es una broma Sophia, en serio, es una broma"

"Lo siento" se adelantó rápidamente "Pero ninguno de mis hermanos esta soltero"

"En fin, fue un gusto conocerte Rene, pero tengo que ir a mi siguiente clase" se despidió mientras tomaba sus cosas y le devolvía la taza a su hermana "¿Te parece este domingo?"

"Claro, no hay problema, así puedo ayudarte antes con el trabajo para Introducción también" le recordó mientras ella asentía "Suena bien"

"Asombroso, nos vemos"  Estaba robándose a su única amiga.

No alcanzó a despedirse mientras alzaba su mano y la veía corriendo de vuelta a su siguiente clase. Alina Bliss era como un huracán que desordenaba todo a su paso con demasiada información en un minuto que ella parecía dominar a la perfección.

"Estás alimentándola, vive para este tipo de cosas"

"Es como una versión más optimista que tú" la molestó mientras las comisuras de sus labios se alzaban en una sonrisa de pura diversión "Como si hubieran sacado todas tus partes buenas y las hubieran puesto en una chica más alegre; no es tan mala."

"Alaska me robó mis partes buenas" — "No pude luchar"

Bajo cualquier punto de vista, Fairbanks era su propio infierno personal. El frío congelaba sus huesos y se había transformado en la versión malhumorada de su hermana menor cada día que pasaba sin darle tregua a una ciudad que no tenía la culpa de su mala suerte; no lo controlaba: Lo único que le gustaba era saber que tenía la posibilidad de ver una aurora boreal por la noche — y eso que ni era algo certero pues ocurría en situaciones bastante especiales que no eran tan comunes como pensaba, nada más que auroras boreales que aún no podía ver.

Eran sentimientos encontrados en su mayoría aferrados a su corazón. Demasiado amarga como para dar su brazo a torcer, pero agradeciendo al mismo tiempo, el haber encontrado refugio en una amistad tan necesaria como la que mantenía con Reny. Posiblemente la persona que estaba cuidando de su sanidad mental en lo que suponía debían ser «Los mejores años de su vida» yéndose por el desagüe absolutamente desperdiciados.

"Entonces" le preguntó con curiosidad dejando de lado un pedazo de pan intacto que había comprado asegurando que tenía hambre "¿Crees que Alina pueda ir a dejarnos mañana? Puedo estar en tu casa a las diez"

"Sí claro" se apresuró a decir segura "Haré un trato con ella"

"No creo que Rene se sienta a gusto con su relación" musitó Lina con el pincel en la mano concentrada que el delineado de su maquillaje le saliera bien al primer intento mientras ella se esforzaba por no respirar para así no moverse "La verdad es que parece atrapada en lo mismo desde que tiene memoria, y no sabe como salir de ella"

"Es un tema bastante personal" el tema había surgido de la nada en plena confidencia dentro de su cuarto con Rene bebiendo cerveza en la sala, podía escucharla cantando junto a la música que sonaba a unos metros de ella "Hay que respetar esos límites, Lina"

"Si lo siente así, tienes que estar ahí para ella — Terminar una relación larga es molesto y necesita a sus amigas más que nunca" no pudo evitar mirarla algo extrañada, poca veces hacía comentarios así tan aposta. La experiencia sentimental de su hermana incluso viéndolo desde afuera, era algo que no le traía buenos recuerdos tan solo al pensarlo en general "No te muevas"

"Lo siento, lo siento" se disculpó rápidamente mientras volvía a la misma posición en la que estaba antes "Solo, que no hablamos de este tema mucho"

"Sé como se sienten esas cosas" la tranquilizó arreglando el pequeño error que había cometido en su delineado gracias al repentino movimiento que había hecho "No es nada B, son cosas del pasado ya"

"Lo sé" susurró, pero no pudo dejarlo de lado cuando comenzó a pensarlo "Pero, yo estuve ahí para tí, ¿No?" fue una pregunta inocente, pero la respuesta era lo más importante de todo. En el momento que la necesitaba siempre estuvo ahí, todas las rupturas, las peleas — ahí había estado sin moverse un poco y le preocupaba que no fuera asi.

El comentario enterneció a la menor de los Bliss, casi como si hubiera recordado las noches donde lloraba para sentir los pasos de Sophia en el pasillo en el completo silencio, se colaba a su cama para acompañarla hasta que conciliara el sueño y dejara de llorar. Sin preguntas ni consejos que no hubiera pedido, solo era compañía humana que se había quedado pasmada en su memoria.

"Siempre has estado conmigo, Phi" murmuró antes de besar su frente, solía llamarla así cuando tenía unos doce años "Así como yo siempre voy a estar contigo, hasta el final" alzó su meñique en el símbolo de la promesa más real para las dos "Lo prometo"

"Siempre" prometió sincera antes de juntar su dedo con el de ella, y es que con el tiempo, Lina era la única familia que tenía más allá de la despreocupación de Helen y su padre inexistente. Su hermana era un verdadero pilar en su vida, uno fundamental.

"Ahora, necesitas divertirte en esta fiesta" murmuró queriendo dejar el sentimentalismo de lado antes de revisar los detalles del maquillaje que le había hecho finalmente dándolo por terminado, había puesto un poco de brillo sobre sus párpados y delineado con negro una delgada línea que agrandaba su ojo en un efecto netamente del color "Y acostarte con alguien por favor, lo mereces a un nivel espiritual"

"René ya debe odiarnos" cambió de tema mientras miraba su teléfono para comprobar la hora "Te estás demorando mucho"

"¿Dejaste las llaves de tu auto adentro?" dijo apurando el paso para que agarrara la chaqueta roja preferida mientras asentía. A penas salió de su habitación ella misma pareció correr a su joyero guardando la pequeña bolsa de hierba en en su bolsillo — Bajo ningún punto de vista su hermana podía enterarse.

"Estás lista?" preguntó René al verla asegurándose de que traía todo lo que necesitaba en sus bolsillos antes de tomar de la botella una nueva botella de cerveza para el camino.

"Completamente"

Los chicos de fraternidad son conocidos por tener fama de idiotas. Todos sabían eso, incluso Sophia lo pensó para cuando salió de su propio auto aferrada a la botella vacía de cerveza y su amiga se despedía de su hermana menor mirando la enorme casa de color azul repleta de gente.

Los chicos de fraternidad, en su mayoría, buscan ligues que sean poco serios y relativamente vacíos, por lo mismo, una fiesta de la misma categoría, era algo que no le llamaba tanta atención como a su amiga. Rene por otro lado, Rene parecía haber entrado otro mundo mientras cruzaban el patio desordenado.

Tal vez era el fuerte volumen de la música — nada parecido a las fiestas que organizaba Alice para ella— o la cantidad de gente que se apretaba en una casa desordenada cuya decoración parecía estar hecha para ser fácilmente movida para festejar, incluso las mismas luces de tonos saturados que fueron como una especie de éxtasi que la hizo apretar su mano contra la de su amiga en pura emoción al minuto de entrar, como si jamás hubiera sido testigo de algo parecido, al menos no como una clásica fiesta universitaria.

En medio de la curiosidad, Sophia había buscado «Forks» por internet antes de darse cuenta que esos cinco mil habitantes significaban pocas fiestas decentes mas tranquilidad, y como una clásica chica de pueblo, la menor de los Cullen realmente nunca había vivido una fiesta donde los asistentes tuvieran la mayoría de edad y una cantidad de luces de neón estúpida que combinaban con el sonido tal vez demasiado fuerte como para una zona residencial.

"¿Me acompañas a buscar algo para tomar?" le preguntó queriendo dejar lo amargada que era por lo menos una noche, quería que su amiga recordara la situación por lo bien que la estaban pasando más que por su humor característico — Sin esperar su respuesta, la empujó dentro de la casa, buscando por todos lados lo que debería ser la cocina en su instinto básico.

"Está demasiado lleno para ser un jueves" dijo la castaña mientras miraba a la gente bailando "¿Mañana no tienen clases?"

"Mañana nosotras no tenemos clases" le recordó tomando un par de vasos plásticos de color rojo "Así que aprovecha la noche antes de que llegue la policía" sugirió guiñándole el ojo "¿Quieres algo para tomar?"

"Lo que sea que vayas a tomar tu" respondió sin saber bien que tipo de cosas se podrían beber en una fiesta así, se quedo cerca de Sophia mientras sacaba un poco de hielo para hacer una mezcla con bebida que no entendió tan bien a lo que miraba a su alrededor.

En la mente de Ren, el alcohol debía ser algo de humanos. Si bien su familia no bebía en lo absoluto, ella había desarrollado un enorme amor por los jugos de fruta y los sabores extraños llevando a su familia a incursionar en el mundo de la comida casi por obligación. Las reglas del alcohol para ella funcionaban distinto, eso creyó mientras chocaba su vaso con el de su amiga en un brindis pequeño que ambas celebraron entre la música.

"No hay fiestas así en Forks" el sonido de la música era tan fuerte, que entre la voz de Rihanna tuvo que comenzar a bailar mientras le daba un sorbo a su vaso: un sabor distinto, más fuerte y dulce que no le molesto en lo absoluto " ¡La música esta muy fuerte, pero se escucha genial!"

"Lo suponía" le dijo entre risas "No te preocupes, Tigre — me comprometo a cuidarte esta noche para que puedas disfrutar toda la experiencia de la fiesta universitaria, es una promesa"

Chocó su vaso contra el Sophia en un brindis antes de beber un largo sorbo que pudo disfrutar mucho mejor que el primero. Un trago que la hizo llegar a la teoría que tal vez necesitaba mucho más que el doble o el triple de alcohol que consumían los chicos hoy en día y que asi solo tal vez, podría experimentar una borrachera digna de chica universitaria. Se suponía que estaba preparada para algo así, era mil veces más madura que cualquiera en ese cuarto, toda su familia se lo repetía diariamente.

"¡Viniste!" el ceño de Sophia se frunció al escuchar la voz masculina a sus espaldas antes de ver a chico alto besando la mejilla de su amiga como si ya se conocieran de hace años "Pensé que no ibas a venir ¡Me alegra mucho verte aquí!"

"No me iba a perder la única fiesta a la que me han invitado personalmente" sonrió, y los ojos de la mayor de los Bliss se abrieron con sorpresa y aprobación "Esta es Sophia, mi mejor amiga en toda Alaska— B, este es Sebastian, el chico que nos invitó"

"Un gusto Sophia" dijo amablemente antes de volver su atención a Rene para hablarle con más entusiasmo que antes —Obvio, su interés era para ella.

¿Le había dicho que era su mejor amiga? El comentario apretó su corazón de todo el cariño que había desarrollado por la chica en tres semana al punto de conectar con ella en un nivel totalmente personal, compartiéndole cosas que en su puta vida habría compartido con alguien a tan poco tiempo de conocerla. Renesmee era una mejor amiga para ella, una que le hacía creer que Alaska no era un lugar tan malo.

"Al ser una de tus primeras fiestas, es importante que sea la mejor de todas" alcanzó a escuchar lo que hablaban mientras le daba un sorbo a su trago, reincorporándose a la conversación "Voy a hacerte un tour por la casa"

La mirada de súplica de Rene fue suficiente como para entenderla, no quería dejarla sola; sin embargo su emoción por huir con aquel Romeo de turno era algo que la llamaba a gritos.

"Creo que iré en busca de las drogas" habló haciendo a ambos reír "Estaré afuera haciendo cosas interesantes"

En realidad, estaría fumando la hierba que había traído en paz y tranquilidad merecía.

"¿Te veo en un rato?"

"Claro que sí" "Nos vamos juntas no te olvides, con tu hermana Alice"

"Antes de olvidarme, ¿Puedes prestarme tu teléfono?" preguntó "El mío está quedándose sin batería y no me puedo aprender el número de mi hermana por nada del mundo" explicó "Voy a guardar el teléfono de Alice y si me quedo sin batería, puedo llamarla del tuyo"

Le pasó el teléfono que mantenía en su chaqueta roja mientras miraba a su alrededor tratando de ver alguna cara conocida, ¿Novac tal vez? No era que hubiera hecho demasiados amigos en su tiempo ahí, sin embargo no conocía a absolutamente nadie en la rápida inspección que hizo mientras que Rene se apuraba en guardar el teléfono de su hermana en el suyo.

"Ya esta" le dijo al devolverle el teléfono "¿Te veo en el patio para bailar toda la noche?"

"Si, claro" — "Ten cuidado Julieta"

"Es solo un amigo, B"

Se aferró más a su chaqueta mientras acercaba el encendedor al mal enrolado porro que había tenido que armar en la oscuridad tratando de que la hierba molida no cayera del papel para perderse en el pasto — No tenía tanto dinero para darse esos lujos—, llenando sus pulmones del humo a la hierba alejada de los demás grupos que se habían formado en el patio.

Bebía de su vaso de vez en cuando en un intento de que el alcohol la hiciera entrar más en calor mientras miraba a los demás en busca de gente que le pareciera interesante, tenía esa mala manía de juzgar a los demás basándose en sus primeras impresiones y no sabía si era un complejo suyo o de la psicología que tanto la perseguía, pero le parecía inevitable ya a la edad que tenía. Podía luchar contra sus instintos, pero era una cosa casi mental — era ese tipo de personas que iba a juzgarte en completo silencio.

El olor medio pasoso a la hierba llenó su espacio mientras se apoyaba en el árbol más cercano a ella cantando a veces por lo bajo algunas canciones que sonaban por el altoparlante sin miedo a la soledad. En verdad, agradecía no tener que hablar con nadie pues así no se hubiera visto obligada a tener que compartir el poco de hierba que tenía con al menos cinco personas más y la idea no podía disgustarle más de tan solo pensarlo, la saliva de gente que no conocía,—

"¿Está la hierba muy buena o eres de esas chicas filosóficas?" la pregunta la sacó de su trance y pudo darse cuenta llevaba mirando punto fijo en el suelo hace ya minutos "Definitivamente esta buena"

"Sí está buena" admitió risueña "He sido expuesta"

"Parecías estar disfrutando de tu solitud pero tenía que reventar tu burbuja para contarte de las reglas de Kappa Omega" se instaló a su lado con total confianza mientras hablaba, y si no hubiera estado tan por sobre las nubes, posiblemente no lo hubiera dejado "Las reglas de la casa dicen que si enciendes un porro en una fiesta tienes que compartirlo con un Kappa"

"Y tu eres un Kappa, supongo"

"Usualmente lo dejaría pasar, pero esta no es mi noche" admitió "Michael, por cierto"

"Sophia" — "¿Mal día?"

"Pésimo, terminé con mi novia ayer" le contó "Lo encontré con un amigo en la cama, vino con él de hecho"

"No jodas" casi pudo sentir su rabia mientras le tendía de su porro, en algo casi de puro honor pues la pésima regla que había inventado no era lo suficiente como para compartir algo — El dolor sin embargo, merecía apoyo "¿Es un Kappa Omega también?"

"Es el presidente" su boca se abrió dramáticamente a lo que le contaban, podía imaginarse toda la situación en su cabeza "Completamente bizarro"

"En realidad es un mal día" concordó con sus palabras "Toda la mala suerte cayó sobre ti"

"Ni que lo digas" el humo llenaba su espacio mientras la chica metía sus manos a los bolsillos de su chaqueta viendo a Michael fumar "No tengo muchos amigos fuera de la fraternidad y necesitaba hablar con alguien que no me conociera" pareció amable y fue como un golpe en el orgullo al notar que sus prejuicios a veces eran estúpidos.

"Por lo menos te diste cuenta" quizo ser optimista por un segundo " Podría haber sido mucho peor"

"Siempre puede ser peor" le devolvió el porro haciendo un ademán de agradecimiento "¿Viniste sola o tus amigos desaparecieron?"

"¡Te he estado buscando por todos lados!" definitivamente, Rene se había confiado de si misma y su supuesta resistencia para beber sin control alguno "¡Nos están retando a una partida de Beer Pong ¿Puedes creerlo? Beer Pong " su amiga ahora arrastraba las palabras al hablar y se encontraba en ese estado medio energético que dejaba el alcohol — ¿Cuánto tiempo había pasado? Una hora como máximo;  el tiempo habia pasado demasiado rápido apoyada sobre el mismo árbol con el porro entre los dedos.

"¿Estás bien?"

"Creo que nunca he estado mejor" le dijo sin ser consiente de que Michael las miraba a su lado como si hubiera sido un espectáculo "Hicimos una ronda de cortos con los amigos de Sebastian y fue divertido como no te imaginas — Pero, me hacías falta"

"No tengo ganas de morir aún" el tan solo pensar en el olor del tequila le provocaba ganas de vomitar, pasaba de los cortos por el bien de su hígado  "Este es Michael, lo conozco desde recién" lo presentó sin querer parecer grosera.

"¿Estas intentando coquetear con mi amiga?"  "Tengo que advertirte desde ya que no se puede"

"Perdónala, los cortos le causaron mucho daño"

"Un gusto Rene" saludó con una sonrisa al encender un cigarrillo, sin embargo, la castaña no le prestó atención mientras tomaba la mano de Sophia entre la suya de manera dramática.

"En serio, quiero patearles el trasero a estos chicos en Beer Pong,  Sophia" pareció salir a flote esa personalidad competitiva que la hacía tomarse demasiado en serio incluso los juegos de mesa que jugaba con su familia al ir creciendo "Te necesito conmigo"

"¿Nos vemos dentro?" le dijo a Michael mientras era arrastrada por la fuerza de Rene — fuerza sobrenatural, por que parecía que había un luchador de la WWE dentro de una chica que apenas tenía diecinueve; sus dedos ahora se habían aferrado a su muñeca y parecían pegados a su piel mientras caminaba rápidamente aún cuando hiciera fuerza hacia el lado contrario queriendo retrasarla "¡Lo siento, Mike!"

"¿Estabas coqueteando con ese chico?" le preguntó cuando estuvieron lo suficientemente lejos y por fin había soltado su muñeca, no había escuchado lo que le había dicho por lo rápido que la alejó  "No era tan guapo"

"Rene borracha es una Rene con más libertinaje" pensó en voz alta ganándose un suave empujón de su parte "No estaba coqueteando, el tipo terminó recién con su novia"

"Necesitas pensar más arriba" — "No que el chico sea feo, para nada, pero tienes que pensar más arriba"

"¿No tenías que patearle el trasero a alguien?"

"Sí, la verdad sí" Pareció volver a recordarlo mientras sonreía maliciosamente, tanto, que su propio rostro pareció cambiar sutilmente en uno mucho más amenazador que el de antes — más intimidante incluso "Hablando de eso, mi teléfono murió, ¿Puedes guardármelo?"

Mientras bebía lo que presumiblemente era más alcohol, Renesmee Cullen pareció brillar místicamente bajo las luces moradas para dejar escapar una risotada de complicidad a lo que le pasaba su teléfono y lo guardaba en su chaqueta.

"Creo que tu vas a tener que llamar a mi hermana más tarde, Soph"

se acuerdan de que dije que iba a actualizar mas seguido? ya, aquí estoy, cumpliendo :-)
creo que se nota que soy una perra de los capitulos largos y la narrativa gigante, me estoy dando el tiempo de crear personajes que tengan lazos igual y relaciones importantes que es demasiado importante lo juro x mi vida (sorry por que no ha pasado mucho sophia x jasper pero MUAJAJAJA SIENTANLO VENIR COMO UN CAMIÓN)
also, sophia x rene me dan +100 años de vida.

ojala les haya gustado tkm<3